martes, 9 de abril de 2024

Relatos Metadiegéticos (3ra parte) - La Aventura de las Pruebas de Imprenta

Seguro:

Trama: Narrativa
Función: Informativa
Contexto: El Seguro contra Accidente que tenía Morel, el cual quería que cobrará su esposa, Alberta. 




Relatos Metadiegéticos (2ra parte) - La Aventura de las Pruebas de Imprenta

 Máquina de Escribir:

Trama: Descriptiva 
Función: Informativa 
Contexto: "La puerta del estadio seguía cerrada, y no se oía el tecleo de la máquina de escribir ni el ruido de una silla o el crujido de las páginas de un libro"




Relatos Metadiegéticos (1ra parte) - La Aventura de las Pruebas de Imprenta

Calmante (Geniol)

Trama: Argumentativa 
Función: Apelativa 
Contexto: "Se encaminó al baño, donde tomó un calmante, que ya no parecía necesitar (su dolor de cabeza había disminuido sensiblemente), y se lavó los dientes"








viernes, 5 de abril de 2024

Intento de Síntesis de "La España Primitiva"


Intento de Síntesis de "La España Primitiva"

 

La historia de la Península Ibérica antes de la conquista romana abarca un cúmulo de datos imprecisos. Sin embargo, se puede afirmar que estaba poblada por pueblos autóctonos cuya lengua ya había sido influida por otros pueblos invasores: los fenicios, los cartagineses y los griegos.

En un comienzo, se encontraban a ambos lados del Pirineo varios pueblos con un idioma común, que sobrevive en el vasco actual. Por un lado, los Íberos, de origen probablemente norteafricano, ocupaban la costa de Levante y regiones vecinas. Por otro lado, los tartesios ocupaban la actual baja Andalucía y el sur de Portugal, mientras que los fenicios y los griegos, pueblos navegantes del Mediterráneo Oriental, se disputaban esta región tartesia. La pugna, que acabó con la desaparición de factoría griega barrida por los cartagineses, herederos de los fenicios, debió de acarrear la ruina de los tartesios. Los fenicios fundaron Cádiz y Málaga.

Luego, los cartagineses fundaron la capital de sus dominios en España, la nueva Cartago (Cartagena). De ellos deriva el nombre de Hispania (España).

Los griegos desterrados prosiguieron en Levante, fundando las colonias Lucentum (Alicante) y Emporion (Ampurias). Provenientes del sur de Alemania, los celtas invaden la Península Ocupando el noroeste. Se dividen en cinco ramas: los lusitanos y gallegos, ubicados en el oeste, en sur y norte respectivamente, y los ligues, astures y cántabros, instalados en las costas del mar Cantábrico. Mezclados con los Íberos, aún en el centro, constituyeron el grupo Celtíbero. Para el Siglo IV a.C., la zona central de España estaba ocupada por este nuevo pueblo, mientras que el norte y el sur seguía dominado por los celtas e Íberos, respectivamente.

Todos estos pueblos permanecieron divididos sin establecer un Estado, con costumbres e instituciones distintas.

La cultura de esta época fue notablemente influida por fenicios, griegos y cartagineses; se pueden ver rasgos culturales muy distintos entre los pobladores de la región sudoriental y los habitantes del interior, de condición más o menos bárbara.

Los fenicios estimularon la industria y el comercio, los griegos desarrollaron el aspecto cultural y artístico, y el arte Ibérico floreció enormemente en contacto con los griegos y las civilizaciones orientales, dándole un nuevo sentido y caracteres propios.

 

La Conquista Romana de España

Se considera que con la ocupación de los romanos empieza propiamente la historia de España. Comenzaron su expansión marítima al terminar la unificación de Italia, creando así su rivalidad con Cartago y dando espacio a las Guerras Púnicas.

Hubo tres de estas, donde Roma resultó vencedora y Cartago fue destruida. Al concluir la segunda, España se dividía en dos regiones: la España Citerior, (toda la zona mediterránea hasta el Ebro) y la España Ulterior, (todo el resto de la Península), la cual los romanos querían conquistar, pero las tribus nativas se defendieron. A comienzos del Siglo III a.C., los romanos consolidaron su hegemonía en la Península.

Los romanos primero conquistaron Emporion (Ampurias) en el 218 a.C. Luego, pasaron a Tarragona, Sagunto, Cartagena y Cádiz. Más tarde, se establecieron en Pamplona y en Lusitania, para finalmente romanizar Galicia y Asturias.

La Roma primitiva se engrandeció gracias a sus virtudes supremas: ruda y con un sentido de dominio. Su cultura traía el concepto de ley y ciudadanía y un sentido práctico que los hizo maestros en la administración, el derecho y las obras públicas.

España fue la primera tierra latinizada, unificándose e incorporándose con el Imperio adaptando rápidamente las costumbres, la lengua y heredando instituciones. Se produjo una unificación política y jurídica en torno al Derecho Romano, promoviendo adelantos materiales como escuelas de arte y ciencia o la difusión de la fe cristiana.

Con la civilización romana, se impuso la lengua latina, difundida por el peso de las circunstancias. Hubo periodos de bilingüismo debido a las lenguas primitivas. Estas con el tiempo quedarían solo en la conversación familiar, logrando una latinización total.

La lengua latina abarcaba dos variedades fundamentales, el serma urbanos, la lengua literaria, y el serma vulgaris, la lengua coloquial, hablada por el pueblo cotidianamente; conocida como lengua vulgar, de donde surgen las lenguas romances.


Decadencia del Imperio Romano – Los Pueblos Germánicos

En el año 107 d.C. el Imperio llega con Trajano a su máxima extensión territorial. Las provincias continuaron romanizándose profundamente, pero a su vez, empieza un movimiento de descentralización política y económica. Primero, decae el prestigio de Italia y Roma en el Imperio. Los pueblos itálicos adquieren la ciudadanía romana, los ciudadanos colonizan provincias, se presentan en ellas como funcionarios, militares o comerciantes y se mezclan con la población local. A su vez, se les otorga la ciudadanía a los soldados extranjeros que defendían la frontera.

Las provincias adquieren mayor importancia económica, ya que Roma solo es un lugar de residencia para los emperadores. Todo esto lleva a que en el año 212 d.C., el emperador Caracalla otorgue la ciudadanía a todos los habitantes.

Se consagra la descentralización. Ya en el 257 d.C., se ve la primera pérdida territorial: los godos ocupan Dacia. Mientras los germanos presionan las fronteras, los jefes del Imperio declaran que una única administración no es la ideal.

Constantino en el 324 rehace la unidad del Imperio, pero da impulso a un nuevo movimiento de división al elevar a Bizantino a metrópolis del Oriente. En el año 392, Teodosio divide el Imperio entre sus dos hijos, dándole a Arcadio el Oriente, con capital en Bizancio (Constantinopla) y a Honorio el Occidente, con capital en Rávena, quedando este último griego debido a la influencia de regiones romanizadas.

En el año 476 el Occidente y la misma Roma caen en el poder de germanos.

La decadencia social, la moral y la cultura romana colaboraron con esta caída. El Imperio se orientaliza y se germaniza, se relajan las costumbres romanas.

Por otro lado, en la Romania occidental, los germanos entran primero de forma pacífica, como soldados. Luego, como colonos buscando trabajo, paz y seguridad, para finalmente, cuando varias poblaciones germanas ya comenzaran el ataque directo contra el Imperio, este ya se encontrara relativamente germanizado.

 

Formación de las Lengua Romances

El latín vulgar predominaba en el Imperio Romano poderoso. Con la invasión bárbara se rompe la unidad política, y por su incultura, los caminos construidos son abandonados y las provincias pierden contacto, debido a diferencias entre los hombres derramados por el Imperio.

  • Los Ostrogodos se quedaron con Italia, al mando de Teodorico.
  • Los Francos se apropiaron de la antigua Galia con Merovco.    
  • Los Angles y sajones ocuparon las islas de Gran Bretaña. 
  • Los Visigodos en la Península Ibérica, expulsando a los Suevos, Silingos, Alanos y Vándalos, establecidos anteriormente. 
  • Los Vándalos y Silingos, recientemente desplazados, mantuvieron su reinado en el norte de África.

La cultura de los conquistadores era inferior a la de los conquistados, por lo que no se crea una unidad lingüística. Cada vez difiere más el latín vulgar entre los distintos sectores por la falta de comunicación. De una sola lengua madre, nacen varias lenguas hermanas, llamadas romances o neolatinas. Enumeradas de Oriente a Occidente son:

  •           El rumano: hablado en la antigua Dacia (Rumania)
  •           El dalmático: lengua muerta hablada en las costas de Dalmacia.
  •           El retoromano: hablado en la antigua Retia (parte de Suiza e Italia)
  •           El italiano: hablado en Italia.
  •           El sardo: hablado en Cerdeña.
  •           El francés y el provenzal: hablado en la antigua Galia.
  •           El portugués, el catalán y el castellano: hablado en la antigua Hispania 

Todas son continuación del latín vulgar, hablado sin preocupación idiomática.

 

Los Visigodos en España

El territorio de España estaba mayormente ocupado por barbaros después de las invasiones. En el año 414 llegan los visigodos al mando de Ataulfo, desplazando a los pueblos germánicos. Walia (sucesor de Ataulfo) inició su dominio sobre el sur de Galia, pero este fue desplazado por los Francos. La corte se estableció en Toledo, su capital.

Los visigodos en el siglo IV abrazaron el arrianismo, difiriendo con los hispanorromanos, aún cristianos, evitando la fusión de pueblos.

Leovigildo (reinó entre 582 y 586) procuró promover el arrianismo, pero al asumir su hijo Recaredo, este cambió la política de su padre, estableciendo públicamente en el 537 al catolicismo.

En los reinos bárbaros, se dejaba el poder en manos de los mejores guerreros. Estos reinos luchaban y se deshacían entre sí.

España fue conquistada pero no germanizada. Sin anular el valor histórico de los visigodos, estos pueblos germanos dejaron una influencia superficial debido a la profunda romanización de España, convirtiendo en nula la influencia lingüística; las palabras germanas se adaptaron a la fonética hispana, incorporándose al latín vulgar.

La monarquía visigoda decae debido a la expansión islámica, ya que la Europa occidental del Siglo VIII se encontraba débil y dividida y la religión estaba deformada.

El último monarca visigodo fue Rodrigo, reinado en el que se acentuaron las discordias internas, llevando a los nobles a pedir auxilio a los árabes para derrocarlo.

 

La Influencia Islámica

 Los árabes, establecidos en el norte de África, habían efectuado repetidos intentos de entrar en la península. El rey Witza había sido destituido del trono de Toledo en el 709, asesinado por Rodrigo. Los hijos del monarca desplazados no dudaron en pedir ayuda a los árabes para la reconquista.

La tradición habla de que el conde griego Julián, gobernador de Septum (Ceuta), mandó a una de sus hijas, Florinda, a educarse a la capital, enamorando así a Rodrigo. Julián se sublevó contra Rodrigo, para derrocarlo, y pidió ayuda a Muza, jefe árabe del norte de África. Los musulmanes aprovecharon la oportunidad a las órdenes de Tarik, atravesando el estrecho, llamado desde entonces, Gibraltar.

Rodrigo fue asesinado en batalla, por lo que los musulmanes penetraron la península, dominándola y obligando a los cristianos a refugiarse en el noroeste.

El Imperio visigótico hubiera caído de todas formas, debido a cuestiones como siervos descontentos o judíos cruelmente perseguidos, quienes esperaban mejor suerte bajo el poder de una raza afín. Tarik vencedor avanzó sobre Toledo.

Los invasores se mostraron tolerantes con los hispanorromanos y visigodos. No obstante, podemos decir que la llegada árabe divide al mundo cultural en dos, dejando en el sur un mundo islámico, y en el norte uno cristiano.

Ahora, quienes continuarían profesando el cristianismo en tierras árabes, pero pagando tributo, serían los mozárabes, y aquellos que se convirtieron para conservar su fortuna, los renegados. A los musulmanes sometidos por cristianos que recuperaron tierras se los llamó mudéjares (cuando cayó Granada se convirtieron, y se los llamó moriscos), y a los esclavos liberados por los musulmanes que abrazaran el Islam, los maulas. Los hijos de musulmanes y cristianos serían muladíes.

Los musulmanes fueron muy tolerantes con ambos pueblos, llegando a compartir la misma Iglesia. En Córdoba se adoraba bajo el mismo techo a Jehová, a Mahoma y a Cristo. Los musulmanes no llegaron a imponer su lengua en este territorio, pero si a aumentar el léxico del castellano, dejándolo con más de 4 mil palabras de origen árabe.

Los árabes eran los maestros, médicos y augures de los príncipes cristianos, y los judíos sus banqueros. Contaban con una imaginación poética importante y envolvían el antiguo saber en una red de supersticiones.

Estos conquistadores sobresalieron en la arquitectura, dejando huellas en España como la mezquita de Córdoba o el alcázar de Sevilla.

Cultivaron todos los géneros de literatura con su imaginación brillante y apasionada, eran aficionados a los relatos fantásticos.

 

La Reconquista de España

La resistencia cristiana contra el poder musulmán comienza con Pelayo venciendo a los moros en la batalla de Covadonga, año 718. Se funda el reino de Asturias, que engrandecido se convierte en León. El nombre de Castilla aparece en el Siglo VIII. En 1230, León queda bajo dominio de Castilla.

En la región montañosa del noreste de la península (pirenaica) se originan los reinos Navarra y Aragón.

Antes de morir, Fernando I divide los dominios entre sus hijos, dándole a Sancho tierras de Castilla, y a Alfonso las de León. Sin embargo, Sancho no cumple con su parte y ataca a sus hermanos, pero es asesinado por un enemigo en Zamora. Alfonso fue proclamado rey de Castilla, con el nombre de Alfonso VI. Este logró tomar la estratégica ciudad de Toledo en 1085, extendiendo las fronteras hasta el río Tajo.

El rey de Castilla Alfonso VIII vence a los musulmanes en la batalla de Navas de Tolosa (1212), abriendo camino a la conquista de Andalucía.

A comienzos del Siglo XIII se había logrado avanzar con la reconquista, en gran parte gracias a Fernando III de Castilla y Jaime I de Aragón, dejando a los musulmanes solo con el reino de Granada. Para fines de este siglo, la península se dividía en cuatro: Castilla, Aragón (los de mayor extensión territorial), Navarra y Portugal.

Luego, reinó el hijo de Fernando III, Alfonso X, el Sabio. Se destacó por su cultura. Afianzó las conquistas logradas por su padre y tomó devuelta la ciudad de Cáliz. La ciudad de Toledo se convirtió en un importante centro cultural.

 

Triunfo del Castellano

El castellano logró ser la lengua heredera de Roma al hacer “renacer su misión unificadora e imperial”, el reino que avanza libertador enfrentando a sus invasores. Llegó a ser lengua unificadora cuando Castilla y Aragón unen sus coronas en 1492 con los Reyes Católicos, expulsando a los musulmanes del reino de Granada. Ahí, Castilla entrega al mundo la lengua oficial española.

Los primeros textos lingüísticos (Siglo X) son anotaciones marginales a modo de vocabulario para traducir textos religiosos de las escuelas San Millán de la Cogolla (Rioja), Glosas Emilianeses, y Santo Domingo de Silos (Burgos), Glosas Silenses.

El latín dejo de ser hablado, se mantuvo como lengua inmóvil de la Iglesia, mientras que el latín español se intensificó. En el siglo XIV la lengua comienza a intentar ser menos ruda y bárbara, buscando parecerse a una lengua materna. Se busca lo deslumbrante en la Antigüedad.

Se quería transformar la lengua vulgar en clásica. A fines del Siglo XV, se produjo una reacción de la corte de los Reyes Católicos, por Antonio de Nebrija, humanista que supo nacionalizar la lengua desde su cede en Salamanca.

Dado en la nota castellana de Salamanca, debía existir un equilibrio entre lo antiguo y lo moderno, entre el cultismo y el popularismo, medida que cifró en la frase de la Reina Isabel: “el buen gusto”

Ya en el 1492, el castellano se encontraba en su fórmula apta para la unidad y expansión, afirmado en lo popular, pero dentro de un cuadro idealista y normativo, soñando con ser la lengua imperial del mundo.

Entonces, Antonio de Nebrija, ofrece la primera gramática española a la Reina Isabel en 1492. En los reinados de Carlos I y Felipe II, el castellano pasa de lengua de unidad nacional a lengua imperial de la cristiandad. Y así como la primera fórmula la diera Nebrija en Salamanca: “buen gusto”, las nuevas consignas saldrían de Toledo (corte imperial de Carlos I) y del Escorial Madrid (corete de Felipe II)

En el Siglo XVI se fija la fonética que aún hablamos: desaparición de la h aspirada, la ç hecha z ó c, la ss y la x hechas j.

 

martes, 2 de abril de 2024

Aparato Crítico - Rodolfo Walsh

Aparato Crítico: 

Rodolfo Jorge Walsh Gill fue un periodista narrador y escritor argentino nacido el 9 de enero en 1927 en Lamarque, Río Negro. Se destacó como pionero del género policíaco y de la escritura de novelas testimoniales como Operación Masacre, considerada la primera novela no ficción. Aunque, también sobresalió como escritor de ficción. Su infancia dejó huellas en su escritura, siendo criado en un colegio de sacerdotes irlandeses para niños pobres. Luego de trabajar como corrector de pruebas y traductor ya en Buenos Aires, publicó Diez Cuentos policiales argentinos. Al publicar Operación Masacre en 1957, sin ser del todo consiente de su aporte, sentó en Argentina lo que más tarde en EEUU se conocería como novela de no ficción, como fue mencionada anteriormente. La indiferencia política de Walsh cambió luego de la caída del presidente Perón y el comienzo del nuevo gobierno. El 24 de marzo de 1977, tras un año del Golpe de Estado de Jorge Videla de 1976, hizo pública la "Carta Abierta a la Junta Militar". El 25 de marzo de ese año, fue secuestrado y asesinado, aunque nunca se encontró su cuerpo, por lo que es considerado uno de los desaparecidos que dejó el golpe. Entre sus obras se encuentran títulos como "Variaciones en Rojo" o "¿Quien mato a Rosendo?"




Producción - Reseña Crítica - La Invención de Morel

Reseña Crítica Realizada con : Agustina Carrazzoni Un clásico inmortal que llega al alma La invención de Morel de Adolfo Bioy Casares D...